Red Dog es un juego de casino de cartas en el que se utiliza una baraja simple de 52 cartas, que se barajan después de cada ronda. Para ganar en Red Dog, tiene que obtener una carta que tenga un valor que esté entre los valores de las dos primeras cartas repartidas. Para cada ronda de juego, se reparten tres cartas: dos boca arriba, y la tercera boca abajo, entre las dos primeras. Usted apuesta al margen entre las dos primeras cartas y a las probabilidades de que la tercera carta repartida esté entre las dos primeras cartas. (El margen es el número de cartas que pueden estar entre los valores de las dos primeras cartas, por ejemplo: si las dos primeras cartas son un 2 y un 6, el margen es 3). Si la tercera carta es idéntica a una de las dos primeras cartas o está fuera del margen, ganará la mesa. Cuando las dos primeras cartas tienen valores consecutivos, la partida se considera un empate, pero cuando las dos primeras cartas son idénticas, se reparte una tercera carta, con la posibilidad de obtener una ganancia de 11 a 1 si obtiene un trío. Tras ver las dos primeras cartas puede aumentar su apuesta original. Tenga en cuenta que los valores de las cartas siguen las reglas estándar del póker, con el as con un valor de 14, en vez de 1. El rey, la reina y la jota valen 13, 12 y 11 consecutivamente. Las demás cartas valen lo que se indica en cada una. Con la Apuesta Progresiva, Red Dog le permite mantener sus ganancias en la mesa y usarlas para la siguiente partida o bien recoger las ganancias al final de cada partida. A continuación puede activar o desactivar la apuesta Progresiva usando el menú Opciones de la Partida. Tenga en cuenta que no puede activar o desactivar la Apuesta Progresiva durante el transcurso de una partida activa. Para desactivar la Apuesta Progresiva, finalice la partida y recoja sus ganancias. Si alcanza el nivel de las ganancias máximas mientras está activada la apuesta progresiva, sus ganancias se recogerán automáticamente después de la siguiente partida finalizada.